Con gusto
y usted dice si así la subimos o pulimos algún detalle más. Gracias.
Esperanza
Sus setenta años no le estorban. Es fuerte, vital todavía. Va y viene por donde quiere sin que nadie se queje. Viejos los cerros, se dice siempre al toc-toc de su bastón. Recorre pasillos, atraviesa jardines y llega hasta la reja de la calle para mirar el mundo a través de ella. Luego, aparece el enfermero y lo lleva de regreso a la comunidad de aquel asilo. Lo sienta en una banca, en la que debe aguardar la llegada de lo que toque: el desayuno, la comida, la cena; la muerte.
Esperanza
Sus setenta años no le estorban. Es fuerte, vital todavía. Va y viene por donde quiere sin que nadie se queje. Viejos los cerros, se dice siempre al toc-toc de su bastón. Recorre pasillos, atraviesa jardines y llega hasta la reja de la calle para mirar el mundo a través de ella. Luego, aparece el enfermero y lo lleva de regreso a la comunidad de aquel asilo. Lo sienta en una banca, en la que debe aguardar la llegada de lo que toque: el desayuno, la comida, la cena; la muerte.
Frío sideral
17 de March de 2020 / 17:08
17 de March de 2020 / 17:08
Para poder escribir en la Marina, tienes que registrarte como usuario o ingresa.