Respuesta educativa
Mi estimado Jorge. Igualmente es un gusto leerte de nuevo. Te deseo un feliz, tranquilo y próspero 2022.
Gracias por el taller y el comentario. Con respecto a tu primera sugerencia me parece muy buena, aunque la condimenté con un poco más de sal. En cuanto a la segunda, fue pifia mía, pues puse coma y después, mayúscula. Al final introduje dos puntos después de "Escuchen". Me parece que es lo correcto.
Queda entonces así, si estás de acuerdo:
—¿Cómo se le ocurre hacer eso, estúpido? —gritó el hombre al otro conductor mientras se apeaba del vehículo.
—Pero es que yo...
—No hay pero que valga, idiota. ¿Cómo puede andar por la calle en ese cacharro si ni sabe manejar? ¿Ya vio lo que le hizo a mi auto?
—Pero usted fue quien chocó contra el mío.
—Claro, porque frenó de improviso.
—Tenía que hacerlo. Estaba la luz roja del semáforo.
—Ah, ¿sí? ¿Puede probarlo?
—No, pero créame, estaba en rojo.
—Rojos tiene los ojos, maldito borracho irresponsable —le escupió mientras regresaba a su coche donde estaban sus hijos—. Vámonos, niños —dijo enfadado—. No es posible razonar con gente tan cretina y agresiva. Escuchen: para sobrevivir en esta ciudad hay que aprender a lidiar con ellos y, siempre, mantener la calma.
¡Un fuerte abrazo!
Gracias por el taller y el comentario. Con respecto a tu primera sugerencia me parece muy buena, aunque la condimenté con un poco más de sal. En cuanto a la segunda, fue pifia mía, pues puse coma y después, mayúscula. Al final introduje dos puntos después de "Escuchen". Me parece que es lo correcto.
Queda entonces así, si estás de acuerdo:
—¿Cómo se le ocurre hacer eso, estúpido? —gritó el hombre al otro conductor mientras se apeaba del vehículo.
—Pero es que yo...
—No hay pero que valga, idiota. ¿Cómo puede andar por la calle en ese cacharro si ni sabe manejar? ¿Ya vio lo que le hizo a mi auto?
—Pero usted fue quien chocó contra el mío.
—Claro, porque frenó de improviso.
—Tenía que hacerlo. Estaba la luz roja del semáforo.
—Ah, ¿sí? ¿Puede probarlo?
—No, pero créame, estaba en rojo.
—Rojos tiene los ojos, maldito borracho irresponsable —le escupió mientras regresaba a su coche donde estaban sus hijos—. Vámonos, niños —dijo enfadado—. No es posible razonar con gente tan cretina y agresiva. Escuchen: para sobrevivir en esta ciudad hay que aprender a lidiar con ellos y, siempre, mantener la calma.
¡Un fuerte abrazo!
Pitágoras
05 de January de 2022 / 15:27
05 de January de 2022 / 15:27
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