Pseudónimo
Hola Pseudónimo,
No se cuanta experiencia tienes en escribir microficciones, pero muchos creen que un texto corto ya es suficiente para ello. La microficción debe, más que cualquier otro género, sorprender, ser original, no caer en caminos trillados y muy clara en su exposición.
La mini es confusa. Tu texto menciona un grupo de ancianos, no informa porqué han sido abandonados, en qué circunstancias, ni los motivos de su falta de cordura o si la falta de cordura es el motivo por el cual fueron abandonados. Luego aparece la muerte como personaje, que los anduvo buscando y, conmovida, les dispensa, perdona el trance. ¿Qué trance les perdona?
Luego más abajo, mencionas nuevamente la muerte ya no como personaje: “Suficiente agonía, muerte y olvido…” y haces un recuento de sufrimientos en la vida de esos ancianos para luego volver introducir la muerte como personaje que se lleva los ancianos sin los papeleos consabidos. Das por sentado que la muerte requiere de trámites. ¿Qué trámites?
No hay originalidad en el texto, es confusa y no tiene un cierre provocador.
La urgencia en presentar los resultados me llevó a obviar este comentario mío y desde luego también privarte de otra opinión. Vuelvo a pedirte disculpas.
Si deseas podemos seguir por correo electrónico esta conversación.
Espero encontrarte el próximo mes, será un gusto y desde luego prometo que trabajaremos más intensamente.
Saludos desde Argentina, que el virus sea leve por tu región.
No se cuanta experiencia tienes en escribir microficciones, pero muchos creen que un texto corto ya es suficiente para ello. La microficción debe, más que cualquier otro género, sorprender, ser original, no caer en caminos trillados y muy clara en su exposición.
La mini es confusa. Tu texto menciona un grupo de ancianos, no informa porqué han sido abandonados, en qué circunstancias, ni los motivos de su falta de cordura o si la falta de cordura es el motivo por el cual fueron abandonados. Luego aparece la muerte como personaje, que los anduvo buscando y, conmovida, les dispensa, perdona el trance. ¿Qué trance les perdona?
Luego más abajo, mencionas nuevamente la muerte ya no como personaje: “Suficiente agonía, muerte y olvido…” y haces un recuento de sufrimientos en la vida de esos ancianos para luego volver introducir la muerte como personaje que se lleva los ancianos sin los papeleos consabidos. Das por sentado que la muerte requiere de trámites. ¿Qué trámites?
No hay originalidad en el texto, es confusa y no tiene un cierre provocador.
La urgencia en presentar los resultados me llevó a obviar este comentario mío y desde luego también privarte de otra opinión. Vuelvo a pedirte disculpas.
Si deseas podemos seguir por correo electrónico esta conversación.
Espero encontrarte el próximo mes, será un gusto y desde luego prometo que trabajaremos más intensamente.
Saludos desde Argentina, que el virus sea leve por tu región.
Lucía
30 de March de 2020 / 16:56
30 de March de 2020 / 16:56
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