Cuando construyeron el muro, partieron el abrazo de los árboles y separaron a familias y amigos a cada lado del límite entre ambas naciones. A pesar de la vigilancia y la prohibición, se deslizaban, entre los resquicios del muro , pequeñas muestras de cariño para mantenerse en contacto y unidos. En su lugar, Pedro envió un pequeño frasco con una parte de él para su novia. Al caer la valla divisoria por voluntad de ambos pueblos, Pedro se reencontró con su prometida y conoció a su hijo que fue concebido gracias al intercambio de material genético a través de la frontera.
Navegando entre líneas
21 de October de 2019 / 04:56
Amor de contrabando 21 de October de 2019 / 04:56
Navegando entre líneas
Amor de contrabando 25 de October de 2019 / 23:25
Graciela Gianetti
 

Para poder escribir en la Marina, tienes que registrarte como usuario o ingresa.