Rutina y Cotidiano se llevan a las mil maravillas, aunque discuten a diario y no se ponen de acuerdo en nada. Un día Libre Albedrío apareció en sus vidas y rompió el vínculo que les unía. Durante un tiempo cada uno anduvo por su lado, sin dirigirse la palabra y sin mirarse a los ojos. A veces entre ellos surgía algún roce, cuando más se aburrían y se echaban de menos. Custodio y Rutina creen que su relación no es tan perjudicial, y como ellos mismos dicen: "Nos conocemos de toda la vida, lo demás es un cuento de nunca acabar, el de "Punto y final."

Ahora hacen su vida normal, pero con plena conciencia el uno del otro. Y como decía aquel: el amor supera todas las crisis.
 
Y colorín, colorado, esta felíz pareja, con un buen sabor de boca nos ha dejado.