Levantaron los brazos en señal de silencio y se escuchó el sonido de varios golpes que se interpretaron como:. “Estoy cansado. Mucho. Amo a papito y a mamá”, Se redoblaron los esfuerzos para extraer escombros. Mientras, los polines metálicos elevaban el esqueleto del edifico para llegar hasta el niño atrapado. El equipo permanecía mudo y con los oídos atentos en busca de más señales sonoras para interpretar. Entretanto el golpeteo se volvió furioso para exigir Coca-Cola, una hamburguesa y un juguete de Barney. Cuando retiraron el último obstáculo, solo encontraron el cadáver de un anciano muerto días atrás con el terremoto.
Malvadisco
17 de March de 2018 / 04:00
Código 17 de March de 2018 / 04:00
Malvadisco
Taller 17 de March de 2018 / 11:27
José M. Nuévalos
 

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