La situación con la tía Cleofas se había vuelto insostenible. Era necia, impertinente, metiche, chismosa, causaba intrigas, roncaba y, además, era cleptómana. El día que apareció colgada del árbol, todos en la familia mostraron sorpresa, horror o pena, y una sonrisa. Había sido envenenada, mostraba heridas de cuchillo y de bala, quemaduras y laceraciones, además de que le cortaron la lengua y las manos. El único testigo juró no haber visto al asesino. Quien también habría tomado parte con gusto en el festín, sabía que, si hablaba, no quedaría ningún familiar que se hiciera cargo de un parapléjico en silla de ruedas.
Lafitte
15 de August de 2022 / 11:07
En familia 15 de August de 2022 / 11:07
Lafitte
EN FAMILA de LAFITTE 25 de August de 2022 / 07:49
Aida López Sosa
 

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