Mi larga lucha contra las fuerzas del mal desde la oscuridad del anonimato me hizo notorio y hasta popular. Descubierto meses más tarde por quienes me buscaban, fui hecho prisionero, acusado de múltiples asesinatos. Luego de varios años de penurias en las sombras, la justicia se impuso para dar paso a mi redención, y cuando el reloj de la torre marcó la hora con solemnidad, llegaron por mí para conducirme, como ordena el protocolo, hasta el trono que merecía por mis acciones. Mientras caminaba por los pasillos en compañía de mis escoltas, los vívidos recuerdos de mis hazañas desfilaron por mi mente. Satisfecho, sonreí a la selecta audiencia congregada en el salón antes de tomar posesión del solio. Me colocaron los brazaletes y la corona fue ceñida sobre mi cabeza. En ese instante crucial tuve la visión reveladora de que solo muerto podrían sacarme de ese lugar. Más adelante lo confirmé, cuando el celador accionó el interruptor y sentí la descarga. El médico legista tendría el privilegio de expedir el certificado respectivo poco después.
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03 de April de 2021 / 17:48
Ascenso al trono 03 de April de 2021 / 17:48
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Jorge Oropeza... ¿on 'tas?. Aquí se te necesita 16 de April de 2021 / 11:15
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Taller 17 de April de 2021 / 15:39
Jorge Oropeza
Jorge: 17 de April de 2021 / 22:14
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Taller 21 de April de 2021 / 15:31
Jorge Oropeza
 

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