Hola Simbad: el texto se centra más en la casa en el árbol que en el árbol.
Luego de las reflexiones con respecto a la ceiba, a la casa y a la situación del personaje, no me cuaja la conclusión a la que se llega, siento forzado el temor a los árboles, como impuesto para cumplir con el tema del mes. Tampoco veo clara la ambivalencia.
En el primer párrafo puede obviarse “un poco” y el “unas” que antecede a frazadas.
Me suena extraña la expresión “cuando vino la inundación”, tal vez quedaría mejor “cuando ocurrió” o “los días de inundación”.
“Tuvimos que vivir...” puede reemplazarse por “Vivimos hacinados” o “Estuvimos hacinados” para evitar dos verbos consecutivos.
Cambia el punto y coma por dos puntos luego de “...le temo a los árboles: por...” o simplemente quita el punto y coma.
Saludos cordiales.