Voyeur - de Pi

Mientras esperaba en casa, una ráfaga de viento abrió las cortinas de la ventana donde, a trasluz, veía esa tarde las siluetas del vecino con su nueva conquista en intenso intercambio de placeres. La sucesión de felatios, cunnilingus, misioneros, vaqueras, cucharas y toda suerte de posturas despertó su lujuria y una envidia malsana ante el desinterés por el sexo y el desdén inexplicable de su mujer.

Los cuerpos, convertidos en carne y fuego, sudorosos y agitados, se materializaron en el instante cuando, en pleno éxtasis, de la boca de un rostro que le resultaba sumamente familiar, surgía un vibrante aullido de placer..
José M. Nuévalos
03 de January de 2021 / 13:17
Adenda a la Selección del día 7/12 (Por cuenta de SAPO) 03 de January de 2021 / 13:17
José M. Nuévalos
 

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