En nuestro París
No es muy tarde para llegar. Tenemos el tiempo atrapado entre nuestros corazones. Ve qué la insignificancia de la grande torre no se compara con esta flor. Vela, es hormosa. ¿Cuántos días tendrá en suelo? Estoy seguro que fue testigo de los más hermosos romances. Sopla y déjala libre, que tenga fe de otros.
Miguel estudia derecho y Luis, medicina. Ya Blanca no sabe qué hacer conmigo, me dice que la locura me carcome, aunque ya sé que mi razón se fue hace mucho tiempo. Algunas noches me despierto, te escribo algo y me acomodo para regresar contigo. Serás a quien siempre correré si tengo la menta desesperada o vacía. Perdí mi vida en la torre; tú me esperaste. Por favor, ya no huyas. Más bien, que ya no huya. Temo de la condición innata del humano, ya casi me mandan ahí.
Te perdía y tú me buscabas. Era el ciclo vicioso del perro y del gato. Creo que, de hecho, Luque me despertó. Él te llora aún, ya no quiere comer ni salir a pasear. Su alma, como las nuestras, ya partieron. Ahora mira al cielo, entre tantas luces estás tú, mi fulgor cesado.
Miguel estudia derecho y Luis, medicina. Ya Blanca no sabe qué hacer conmigo, me dice que la locura me carcome, aunque ya sé que mi razón se fue hace mucho tiempo. Algunas noches me despierto, te escribo algo y me acomodo para regresar contigo. Serás a quien siempre correré si tengo la menta desesperada o vacía. Perdí mi vida en la torre; tú me esperaste. Por favor, ya no huyas. Más bien, que ya no huya. Temo de la condición innata del humano, ya casi me mandan ahí.
Te perdía y tú me buscabas. Era el ciclo vicioso del perro y del gato. Creo que, de hecho, Luque me despertó. Él te llora aún, ya no quiere comer ni salir a pasear. Su alma, como las nuestras, ya partieron. Ahora mira al cielo, entre tantas luces estás tú, mi fulgor cesado.
Gris azulado
11 de November de 2017 / 09:09
11 de November de 2017 / 09:09
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